LA SOMBRA I

La sombra se proyectó sobre la casa y la dejó en tinieblas. Tan profunda. Tan negra. Tan sádica bajo su máscara.
La sombra no se conformó con tragarse la luz, y entonces también se tragó el aire. La sombra de la muerte y la sombra de la vida. Como una patética conjunción de los contrarios.
Nani levantó hasta el tope las persianas, con desesperación. Buscaba un rayo de luz. Tan ingenua era.
La sombra penetró por el mayor espacio de las ventanas y se apropió de todos los rincones. Se apoderó de la totalidad de la casa. Pero, por supuesto, nunca pudo conocer el sol.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los momentos de la muerte... Ali, no sólo la eternidad es ahora, sino que YA estamos todos del otro lado de la vida, porque el tiempo es infinito...
Si, es una sombra, que asola esta vision del universo... En elinfinito, todos estamos viviendo una vida que todavia no conocesos... Perop estamos.